¿De dónde vienen los síntomas?

Las personas con fibromialgia saben perfectamente el gran número de síntomas que se puede llegar a tener con esta enfermedad. Sin embargo, el origen de los síntomas no está claro y en ocasiones desorienta al propio paciente que no sabe precisar si son debidos a la fibromialgia o a otras enfermedades diferentes.

Conocer el origen de los síntomas permite al paciente tener un control mejor de la enfermedad y proporciona la tranquilidad y la seguridad necesarias para hacer frente a esta enfermedad tan complicada. Por ello, voy a tratar de explicar con pocas palabras de dónde pueden venir los síntomas que tiene un paciente con fibromialgia para que así pueda hacerse un buen esquema de su situación y afrontarlos con éxito.

El dolor, el cansancio o la intolerancia al ejercicio físico sugieren que el problema pudiera estar en el aparato locomotor. Pero, las investigaciones realizadas hasta el momento no han permitido obtener ninguna conclusión en la mayoría de los casos por lo que debemos pensar que estas estructuras están bien y los síntomas se originan en otra parte.

En la actualidad, cada vez más se piensa que el origen de estos síntomas está en los núcleos cerebrales y en los neurotransmisores nerviosos y no en las estructuras del aparato locomotor. Por este motivo las radiografías, ecografías, resonancias y otras exploraciones del aparato locomotor nunca dan información para explicar estos síntomas .

Los síntomas como ansiedad, depresión o apatía, presentes hasta en el 70% de los pacientes, se ha pensado siempre que eran debidos a una enfermedad psiquiátrica de base que terminaba por producir la fibromialgia. Sin embargo, según nuestras investigaciones, esto no es así sino todo lo contrario: la fibromialgia es la que termina por producir estos síntomas en un elevado porcentaje de los pacientes.

Otros síntomas muy frecuentes como dolores de cabeza, sequedad, ruidos de oídos, palpitaciones, mareos al ponerse de pie, ardores, atragantamientos, dolor abdominal, diarrea, estreñimiento, sudoración intensa, picores generalizados, alteraciones de las regla o cistitis, se originan en el sistema nervioso autónomo y pertenecen a lo que se llama disautonomía.

El sistema nervioso autónomo se encarga de las funciones de regulación general del organismo controlando múltiples órganos y sistemas, entre los que se encuentran todas las glándulas endocrinas. Realiza sus funciones sin necesidad de que tengamos que pensar en ello y por esta razón se dice que es autónomo, a diferencia del resto del sistema nervioso que necesita de nuestra voluntad para realizar cualquier acción.

Pues bien, cuando existe una alteración de los neurotransmisores, núcleos centrales o vías nerviosas -como sabemos que ocurre en la fibromialgia- una parte que también se altera es el sistema nervioso autónomo. La consecuencia es que muchas funciones fisiológicas del organismo pueden verse afectadas y dar origen a los múltiples y variados síntomas que hemos mencionado antes. Nuevamente, como son alteraciones funcionales y no orgánicas, las exploraciones como endoscopias, ecografías, TAC, resonancias, etc., tampoco proporcionan hallazgos relevantes y se puede prescindir de ellas en la mayoría de los casos.

Otra fuente importante que puede explicar el origen de algunos síntomas -y que no debe pasar desapercibida por su importancia- es la medicación. La mayoría de los pacientes consume varios fármacos, y muchos de ellos están polimedicados; todos los fármacos, sin excepción, tienen efectos secundarios; la combinación de unos fármacos con otros produce interacciones, en algunos casos muy graves; el resultado final es que muchos síntomas son producidos por la medicación y no por la fibromialgia. Por cierto, esta es la parte de los síntomas que se trata con mayor facilidad, basta con suspender el exceso de medicación.

Por último, no hay que olvidar que además de la fibromialgia pueden existir otras comorbilidades asociadas que sean responsables de algunos síntomas. En estos casos hay que confiar en la experiencia del médico para determinar qué síntomas pertenecen a una o a otra enfermedad y, por supuesto, que se lo explique adecuadamente al enfermo para su mayor tranquilidad.

En resumen, en las personas con fibromialgia, los diferentes orígenes de los síntomas deben ser bien conocidos tanto por el paciente como por el médico con el objeto de evitar exploraciones innecesarias, proporcionar el tratamiento más adecuado y obtener así un control óptimo de la enfermedad.

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3 Comentarios

  1. Beatriz

    Se agradece una explicacion, verdadera y de un profesional mas aun. Gracias a los profesionales que estan con nosotros los pacientes, y nos dan informacion profesional

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  2. Ana Maria

    Hace 14 meses comencè con mucho agotamiento el cual se atribuìa a la realizaciòn de muchas tareas domesticas, me sugerian que descansara , pero al hacerlo no me podìa parar para lograrlo debia agarrarme de algo y esperar un ratito para poder comenzar a caminar. los dolores insoportables , Me realizaron todo tipo de estudios los cuales no arrojaban ningun diagostico,Hasta que un dìa le dije al Dr. ;que quiere doctor si a mi me duele todo, ahi me derivaron a reumatologa ahì comenzaron con nuevos estudios y determinaron que lo mìo era POLIMIALGÌA. donde el medicamento de cabecera con sus agregados era la deltisona, ¿ cual es la diferencia entre Fibromialgia y Polimialgia? Actualmente algo he mejorado pero aparentemente tengo recaidas por ej: hace màs o menos 15 dìas que no puedo pisar y me duelen mucho las manos

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    • admin

      Polimialgia se refiere a una enfermedad con un componente inflamatorio asociado y para su tratamiento se utilizan los corticoides (deltisona)

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